La derrota frente a Rosario Central en Arroyito encendió las alarmas en Núñez. River quedó tercero en la tabla anual y ahora necesita ganarle a Sarmiento para no perder terreno en la lucha por la clasificación a la Copa Libertadores. Tras dos días de descanso, el plantel volvió a los entrenamientos con un panorama complicado para Marcelo Gallardo, que debe rearmar un equipo plagado de bajas y con pocas certezas.

El técnico no podrá contar con los seis futbolistas convocados a sus selecciones (Gonzalo Montiel, Lautaro Rivero, Marcos Acuña, Kevin Castaño, Juan Fernando Quintero y Matías Galarza) ni con los suspendidos Juan Carlos Portillo y Maximiliano Salas. En este último caso, el club confía en que el Tribunal de Disciplina reduzca la sanción a una fecha. En Núñez hay optimismo y aseguran que la resolución podría favorecer al delantero. Mientras tanto, Gallardo ya trabaja con la posibilidad de armar un once inédito con variantes en todas las líneas.

En medio de tantas ausencias, la buena noticia podría llegar desde la enfermería. Sebastián Driussi, quien sufrió un desgarro en el bíceps femoral durante la ida ante Palmeiras, completó casi tres semanas de trabajos diferenciados y está cerca de recibir el alta médica. Su regreso sería un alivio para Gallardo, que lo considera una pieza clave en ataque. También Enzo Pérez podría reaparecer tras el profundo corte en la rodilla que lo marginó tres partidos, mientras Gonzalo Martínez y Maximiliano Meza intensifican su recuperación para intentar reaparecer después de más de tres meses sin jugar.

El panorama general sigue siendo exigente: River acumula 18 jugadores fuera de la convocatoria entre lesionados, suspendidos y citados a selecciones. A la lista se suman Germán Pezzella, Agustín Ruberto y Giorgio Costantini, quienes no volverán a tener acción hasta 2026. En el caso del "Pity", los médicos prefieren no apurar los tiempos debido a la reiteración de lesiones musculares, mientras que Meza ya supera los 90 días de rehabilitación y será exigido para determinar si está en condiciones de volver ante Sarmiento.

Un rompecabezas para Gallardo

De cara al partido en el Monumental, el entrenador planea un esquema flexible que podría variar según las recuperaciones de los próximos días. Si Driussi y Salas logran estar disponibles, el técnico podrá recuperar potencia ofensiva y opciones de recambio en un cierre de año que exige resultados inmediatos. Con tantas bajas y sin margen de error, Gallardo confía en la mística del grupo para sostener la ilusión de meterse en la próxima Libertadores y cerrar la temporada con un mensaje claro: River siempre pelea hasta el final.